UNA DE LAS INICIATIVAS
DEL CARDENAL BERGOGLIO
Los catequistas de las villas
miseria, las zonas más pobres de Argentina cuentan cómo el entonces cardenal
iba allí a enseñar él mismo a los pobres. Antes de ser
elegido Papa, Bergoglio no era tan conocido como otros cardenales, pero en
su Argentina natal tenía una gran reputación, y además siempre conseguía
sorprender a su gente.
De este modo, Juan Manuel Duarte, un catequista argentino explica que
“llegó solo, sin custodios, sin auto oficial, una persona totalmente humilde.
Nosotros nos quedamos todos mirando. Decíamos ¿quién es? ¿El cardenal? No,
esto es una broma".
Y es que Duarte es catequista en una de las áreas más pobres de
Argentina. Recuerda cuando conoció a Bergoglio por primera vez. Fue durante una
misa en la que un grupo se preparaba para ir a predicar el Evangelio entre los
más necesitados.
“Hizo toda una explicación de lo que era dar catecismo y de lo que
era dar catecismo en las villas. Para nosotros ese fue un momento único.
Imagínate habían más de 2.000 personas”.
Ahora ese estilo sencillo y humilde es lo que más impresiona en Roma.
Las imágenes del Papa saludando a los asistentes después de la Misa
sorprendieron a quienes no le conocían, pero quienes le conocen aseguran que simplemente
es su modo de ser.
De hecho, Duarte asegura que el cardenal Bergoglio nunca pidió un
trato especial, a pesar de ser una de las figuras religiosas más destacadas de
Argentina. “Y como más loco fue que se quedó a comer después con el padre, con
los catequistas, con la gente, lo mismo que comían todos. De la olla popular,
gigante, el guiso villero, la torta frita”.
A pesar de que el mundo se
sorprende porque el Papa desea servir directamente a los pobres, Duarte afirma
que eso es exactamente lo que ha hecho durante años en Argentina, cuando era
cardenal, obispo o un sencillo párroco.
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