SEMINARIO, DE VISITA
Esta tarde
he visitado a un amigo que reside en el Seminario de Pamplona desde hace unos
meses. En un momento, he vuelto a recordar, no sin cierta nostalgia, los doce
años que yo viví en otro Seminario, en el de Palencia.
Ha sido
como un retroceso en el tiempo. Un revivir experiencias pasadas. Libros y
rezos, ilusiones y sueños.