DÍA 25 DE MARZO DE 2012
DIOS NO SE DEJA GANAR EN GENEROSIDAD
Allá, al principio de la Cuaresma -iniciamos hoy la quinta y última semana- comencé a comentar el Mensaje Cuaresmal que Benedicto XVI nos escribió con este motivo. Me parecía que no iba a disponer de material para tantos días, pero, hete aquí, que parece va a ser posible.
De todas formas, durante estos últimos días voy a ser un poco más breve y voy a tener que hacer algún equilibrio para cumplir mi promesa. Lo intentaremos.
El Romano Pontífice nos ha propuesto una meta alta. Una tarea difícil pero posible. A estas alturas del Discurso nos da la clave para cumplirla: es cuestión de aceptar la gracia de Dios que a todos se nos regala.
Fíjate en estas palabras: "Todos hemos recibido riquezas espirituales o materiales útiles para el cumplimiento del plan divino, para el bien de la Iglesia y la salvación personal (cf. Lc 12,21b; 1 Tm 6,18)".
Dios que nos pide cumplir su voluntad, que nos marca una senda a recorrer, una santidad que lograr, nos regala los medios. Qué bien lo recoge el viejo dicho: "Dios no se deja ganar en generosidad".
"El Fundador del Opus Dei nos enseñó a que, sin dejar de poner los medios, tengamos confianza en Dios y que Dios no se deja ganar en generosidad".
PINCHA AQUÍ
http://www.es.josemariaescriva.info/articulo/comprobe-que-dios-no-se-deja-ganar-en-generosidad
Allá, al principio de la Cuaresma -iniciamos hoy la quinta y última semana- comencé a comentar el Mensaje Cuaresmal que Benedicto XVI nos escribió con este motivo. Me parecía que no iba a disponer de material para tantos días, pero, hete aquí, que parece va a ser posible.
De todas formas, durante estos últimos días voy a ser un poco más breve y voy a tener que hacer algún equilibrio para cumplir mi promesa. Lo intentaremos.
El Romano Pontífice nos ha propuesto una meta alta. Una tarea difícil pero posible. A estas alturas del Discurso nos da la clave para cumplirla: es cuestión de aceptar la gracia de Dios que a todos se nos regala.
Fíjate en estas palabras: "Todos hemos recibido riquezas espirituales o materiales útiles para el cumplimiento del plan divino, para el bien de la Iglesia y la salvación personal (cf. Lc 12,21b; 1 Tm 6,18)".
Dios que nos pide cumplir su voluntad, que nos marca una senda a recorrer, una santidad que lograr, nos regala los medios. Qué bien lo recoge el viejo dicho: "Dios no se deja ganar en generosidad".
"El Fundador del Opus Dei nos enseñó a que, sin dejar de poner los medios, tengamos confianza en Dios y que Dios no se deja ganar en generosidad".
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