¿Cuántas
veces nos hemos preguntado las razones de que nuestra vida sea tal como
es? Muchas veces nos preguntamos por qué los problemas y las pruebas nos
acucian y otras por qué no podemos ser iguales a otras personas. Nadie
tiene respuesta para estas preguntas y es vano que hagamos consideraciones que
intenten “medir” a Dios y sus planes.
Es
interesante lo que San Gregorio nos indica: “entender a Dios es difícil, pero
expresarlo es imposible” ¿Cómo podemos hablar de Dios? ¿Qué podemos decir de
Él? ¿Podemos conocer su Voluntad completamente?