jueves, 1 de septiembre de 2011

DÍA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2011

ESCUCHAR Y HABLAR A DIOS 

Junto a la puerta del despacho de la Parroquia de Santa Teresa de Jesús, de Pamplona, está colocado un buzón para recoger la correspondencia que llega por correo ordinario. Es un buzón metálico, no muy grande. Lo suficiente para admitir revistas, propaganda y cartas. Estos son, en general, los objetos en él depositados.
Alguna que otra vez, aparecen otras cosas. Desde un sobre con una sustanciosa aportación económica, ¡muy de agradecer!; pasando por unas llaves que alguien se ha encontrado en la calle; hasta algún que otro panfleto, con mensajes ofensivos. Y, de vez en cuando, aparece el buzón lleno hasta arriba con la revista “La Verdad”, que el repartidor, al encontrarse con la puerta cerrada, prefiere hacerlo así, que dejarlas en el suelo.

Lo abrimos, sólo los sacerdotes, todos los días o casi todos los días. Y todos los días, excepto en verano, encontramos contenido, material más o menos importante. Lo que demuestra que esta Parroquia tiene vida y ofrece un movimiento de papel considerable.

Y ahí termina la emoción del buzón. Antiguamente recibir el correo, era otra cosa. Hoy es dintinta la oferta que ofrecen los carteros. Antes, toda la información llegaba por correo ordinario. Hoy las cosas han cambiado: hay noticias e información que llega por teléfono; otra información llega por correo electrónico; otras, por mensajes en los móviles, incluso por internet podemos conectar con los Delegaciones diocesanas e informarnos directamente de las actividades a desarrollar.

Por eso digo, que en abrir el buzón cada mañana termina la emoción de las noticias y posibles secretos. Lejos queda la carta que te entregaba en mano el cartero; lejos la emoción al abrir el sobre con el "abrecartas" para no dañar el contenido interior; lejos las llamadas a la centralita para hablar con el que te llamaba del otro lado del agua y al que había que esperar, a veces horas.

Todo ha cambiado. Sólo una cosa sigue igual: que Dios nos habla enviándonos cada día la Palabra de Dios, "su carta"; y la posibilidad de hablar nosotros con El. Basta recogerse un instante y escuchar; basta recogerse un instante y conectar; El siempre nos espera.

Leía hace un rato en la Exhotación Apostolica Postsinodal Verbum Domini sobre la Palabra de Dios en la vida y en la Misión de la Iglesia (30-IX- 2010), que "la novedad de la revelación bíblica consiste en que Dios se da a conocer en el diálogo que desea tener con nosostros". Hay pues que hablar a Dios y escucharle.

A propósito de escuchar, te regalo estas palabras de San Josemaría, que luego pudes escuchar en el video: "Les decía yo hace unos días a otros amigos vuestros y míos que hay un teléfono directo entre las dos grandes potencias del mundo, entre Rusia y Estadios Unidos, y así evitan conflictos; pero que nosotros nos olvidamos que tenemos un teléfono más directo con el Señor, y que el Señor está pegado al teléfono, está aguardándonos y cuando nos ponemos en su presencia, El nos escucha; id pues a la oración todos los días, haced un ratito de oración, por lo menos oración vocal y mejor oración mental".

Secreto: Escuchar a Dios y hablar a Dios.

PINCHA AQUÍ

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Y me pregunto ¿qué objeto, hecho o acción le llevará mañana, si Dios quiere, a ver la mano de Dios en ello. Increible.
Oración. te doy gracias señor porque cada día hay muchas personas que saben ver la mano de Dios en todo y nos ayudan a los demás a descubrirlo.
Gracias, Señor y ayuda con tu gracia a este sacerdote que cada día nos deleita, nos enseña y nos anima a ser mejores.
Igual me he pasado y esto no es un comentario, pero hay que dejar hablar al alma.

Mercedes dijo...

D Josemaria muy impresionante su comentario
Estoy con muchas cosas pendientes y no tengo mas tiempo para mas
cuando pase por la parroquia ya comentare el comentario de hoy
su feligresa meme

joseluis dijo...

Jose Luis
tengo ganas de pasar un dia por su despacho y comentar el bien que me esta haciendo sutestimonios
un saludo pasare a rezar a SantaTeresa