domingo, 16 de octubre de 2011

DÍA 16 DE OCTUBRE DE 2011

SANTA TERESA DE JESÚS

Ayer celebrábamos en nuestra Parroquia, la fiesta de nuestra Patrona, Santa Teresa de Jesús. Teresa de Cepeda y Ahumada, más conocida por el nombre de Santa Teresa de Jesús o simplemente Santa Teresa de Ávila, nació en Ávila el  28 de marzo de 1515 y murió en Alba de Tormes el 4 de octubre de 1582. Fue una religiosa, doctora de la Iglesia Católica, mística y escritora española, fundadora de las carmelitas descalzas, rama de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo o carmelitas.


Con su hermano Rodrigo, lee la vida de los santos, y huyen de la casa con la intención de ser mártires en la tierra de moros.
Su tío los encuentra y los trae de regresa; decide entonces con su hermano hacerse ermitaños y en la huerta se rodean de piedras.


Se le suele representar con una flecha atravesando su corazón por el gran amor que profesó a Jesucristo; también con una paloma representando al Espíritu Santo, a veces también se la representa con un clavo en la mano, pero sobre todo se la suele representar, con una pluma en una mano y un  libro en la otra.
Símbolos que nos enseñan que Santa Teresa de Jesús fue una gran escritora y además, desde hace unos años, doctora de la Iglesia.

Es por eso, una persona que nos puede enseñar muchas cosas. A todos. No sólo a las religiosas y personas entregadas más de lleno a Dios, sino a todos. A los estamos iniciando el camino de amor a Dios y a los que llevan un gran trecho recorrido. A todos. Y especial a nosotros que le tenemos como Patrona.

En el prefacio de los santos decimos los sacerdotes estas palabras: “Mediante el testimonio admirable de los santos, Señor, nos das pruebas evidentes de tu amor; ellos nos estimulan con su ejemplo en el camino de la vida y nos ayudan con su intercesión.

¿Qué nos enseña la vida de Santa Teresa de Jesús? Muchas cosas, hoy me quiero fijar en una sola cosa. Santa Teresa con su vida y sus escritos –nos olvidemos lo de la pluma y el libro-, nos enseña el valor de la oración en todo tiempo y lugar; y cómo la interioridad nos lanza a la acción apostólica más asombrosa y práctica.

Nos ha dejado este hermoso poema, como programa de toda una vida:

Nada te turbe,
nada te espante
todo se pasa,
Dios no se muda,
la paciencia todo lo alcanza,
quien a Dios tiene
nada le falta
sólo Dios basta.

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1 comentario:

mercedes dijo...

No tengo palabras para poder decir mas
Tolo dice el testo
Me siento muy contenta de pertenecer a la paroquia de Santa Teresa
lo meditare mucho
su feligresa
meme