viernes, 17 de enero de 2020

17 DE ENERO DE 2020






Querer y dejarse querer. 

No basta darse a los demás, es necesario posibilitar que 
los demás nos ayuden. 

Me venían a la cabeza estos pensamiento a propósito de las escena de los cuatro que llevaron a un paralitico a Jesús.

Los cuatro eran generosos, pero el paralitico se dejó querer.

El paralitico fue agradecido, pero permitió que sus amigos 
se desvivieran por el.

Por eso, repito: 

No basta querer, hace falta dejarse querer. 

Unos y otros.


jueves, 16 de enero de 2020

16 DE ENERO DE 2020




Anochece. 
Una jornada más en el recorrido 
de la vida. 

Gentes cercanas por las calles y gentes desconocidas, 
allá en la lejanía. 

Unas y otras tiene algo que ver conmigo. 
Por todas pido y por todas sufro. 

Pasos serenos y avemarías silenciosas. 
Comunión de los santos. 

Y un rayo de esperanza en la mente. 
Gentes cercanas y gentes lejanas. 

!!!Gente, gente¡¡¡

miércoles, 15 de enero de 2020


15 DE ENERO DE 2020




Un buen libro es como un buen amigo. 
Hay muchos buenos libros como existen muy buenos amigos.

Pero hay que encontrarlos. 

Y después, seguir en la lectura y en la amistad.
Y ya no dejarlos. 

El libro se puede terminar de leer, pero queda, deja poso.

El amigo puede alejarse físicamente pero permanece la amistad. 

Un buen libro, un buen amigo.

!!!Que bendición¡¡¡

martes, 14 de enero de 2020




14 DE ENERO DE 2020





Catorce de enero. Sol y frío en la ciudad de Pamplona. Las tardes se van alargando y huele a nieve por las calles. Aún está lejos pero no sería extraño que cualquier día de estos nos visite. 

Ir y venir por la vida. Rezos y trabajos, amistades y desconocidos. Un saludo a los amigos y un hasta pronto a los extraños. 

Catorce de enero: sol y frío en la ciudad. 

lunes, 13 de enero de 2020


13 DE ENERO 2020


EL MANUSCRITO DE ANTIOQUÍA
SINOPSIS
Mi nombre es Lucas de Antioquía. Estos pliegos manuscritos los he ido escribiendo, tarde a tarde; los primeros, en mi casa paterna de Antioquía, tercera ciudad del mundo grecorromano, con su muralla de las trescientas torres, en una de las cuales yo nací. Yo era muy niño y vivía muy lejos de donde sucedieron estas cosas, pero intenté ir recogiendo en estos papiros, a modo de vademécum: lo que iba oyendo, y escuchando, y rumiando de mis mayores y de, mis  mejores amigos especialmente Pablo de Tarso; lo que contaban las gentes sencillas que lo vivieron personalmente, que fueron testigos de todo ello. Siempre me ha encantado escuchar a los testigos de las cosas que pasaron. Tardé más de lo debido en convencerme de cómo ardían en mi corazó.

Nota: Estoy leyendo este libro.

domingo, 12 de enero de 2020

DIA 12 DE ENERO 2020





Con la fiesta del Bautismo de Jesús continúa el ciclo de las manifestaciones del Señor, que comenzó en Navidad con el nacimiento del Verbo encarnado en Belén, contemplado por María, José y los pastores en la humildad del pesebre, y que tuvo una etapa importante en la Epifanía, cuando el Mesías, a través de los Magos, se manifestó a todos los pueblos.
Hoy Jesús se revela, en la orillas del Jordán, a Juan y al pueblo de Israel.

sábado, 11 de enero de 2020






ABBÁ

ABBÁ, es la expresión aramea con la que el niño identifica a su papá.

Teológicamente, es de suma importancia porque se remonta a Jesús de Nazaret, que, con esta expresión, se dirigía a Dios y enseñaba a hacer lo mismo a sus discípulos.

En la historia de las religiones se encuentra fácilmente el apelativo «padre» para dirigirse a la divinidad: existe particularmente esta tradición en Egipto: el faraón, en el momento de su entronización, se convierte en hijo del dios Sol y es igualmente dios. También el Antiguo Testamento (…) adoptó esta misma perspectiva. En los relatos del Éxodo se crea varias veces un paralelismo entre la filiación de Israel y la de los egipcios para contraponer sus diferencias étnico-religiosas (Éx 4,22).

Por temor a que se le interpretara indebidamente en sentido mítico, Israel usará con prudencia este título aplicado a Yahveh.

En diversas épocas históricas hubo varios personajes calificados con el título de «hijo» de Dios: en primer lugar, el pueblo: luego, los ángeles que constituyen su corte: finalmente, algunos hombres concretos que mantuvieron pura y sólida su fe.

De todas formas, fue sobre todo el rey-mesías el que mantuvo el privilegio de una relación particular con Dios (2 Sm 7,14).

Por primera y única vez en toda la historia de Israel se le aplicó la expresión: «Tú eres mi hijo: yo te he engendrado hoy» (Sal 2,7).

Es evidente que, debido a su fuerte caracterización monoteísta, Israel se interesaba sólo y exclusivamente por una filiación del rey en sentido adoptivo. De todas formas, nunca se atreve el israelita en el Antiguo Testamento a pronunciar una oración dirigiéndose a Yahveh con el vocativo «abba».

A la prudencia del Antiguo Testamento se opone el uso abundante de esta palabra en el Nuevo Testamento. 

La expresión aparece más de 250 veces, hasta el punto de que se identifica con la fórmula típica con que los cristianos se dirigen a Dios.

El fundamento de esta costumbre es la actuación misma de Jesús. Desde las capas más primitivas y arcaicas de la tradición. Es posible ver en el “abba” el lenguaje peculiar con que él se dirigía a Yahveh, demostrando así que tenía con Dios una relación de filiación natural (Mc 13,32).

En varios textos se advierte el uso peculiar que hacía Jesús de esta palabra: no sólo en la invocación  “abbá” que Marcos se siente en la obligación de trasladar literalmente del arameo, añadiendo inmediatamente después su traducción griega (Mc 14,36), sino también en la Calificación de «Padre mío» (Mt II,27).

Esta relación filial es única, hasta el punto de que se utiliza también la fórmula diferente «Padre vuestro» dirigida a los discípulos (Lc 1 1,13).

El uso de «Padre nuestro», por su parte, es sólo para los discípulos, ya que se trata de una oración que les enseña Jesús (Mt 6,9).

Así pues, «abba» encierra las notas de intimidad, de confianza y de amor, pero expresa también claramente el motivo de la condenación de Jesús: «No es por ninguna obra buena por lo que queremos apedrearte. sino por haber blasfemado: pues tú, siendo hombre, te haces Dios» (Jn 10,34): esta pretensión era tan absurda para sus contemporáneos que jamás habrían podido concebir la relación con Dios en estos términos.

Por R. Fisichella

viernes, 10 de enero de 2020

ENERO DE 2020

Han pasado años, meses,semanas, días. Aquí estoy de nuevo. Un saludo a todos. Y Feliz año nuevo.

viernes, 30 de junio de 2017

madera de santo

No basta tener madera de santo.


lllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllll
DESPUÉS DE DOS AÑOS



Vuelvo. No me ido. 
Sólo me he escondido unos días. 
He estado dando vueltas a la noria. 
Y aquí estoy otra vez. 
Vuelvo de nuevo.






sábado, 27 de agosto de 2016

ORACIÓN A SANTA MÓNICA

Gloriosa Santa Mónica, modelo de madres. Tu vida la admiramos en los vaivenes de tu hogar y sobre todo, siguiendo a tu hijo Agustín. Supiste atraer a tu esposo hacia Dios e igualmente a aquel hijo que había perdido la fe. Le seguías llamándole, orando, llorando... Consíguenos que comprendamos el papel sagrado de las madres y su influencia en el hogar. Confiamos nuestra familia a tu protección.

miércoles, 4 de marzo de 2015

VIEJOS ESCRTOS

Y ME HABLÓ LA MADERA
El taller en cuestión tenía unos portales de madera vieja en la que aparecían de forma destacada muchos herrajes. Uno de los jóvenes dio tres aldabonazos con gran fuerza.
Al poco rato, apareció el hombre del calzón verde y blusa negra que se había adelantado de nosotros en un negro caballo de raza árabe. Saludó a los jóvenes con palabras amables y a mi me miró con ojos complacidos. Enseguida ordenó la forma de trasladarse del carro al interior del taller. Para ello, volvieron a utilizar el tablón de madera sujeto a seis ruedas. La operación de descargue fue similar a la de cargue. Todo salió con exquisita perfección. Se ve que aquellas personas además de habilidad tenían una gran experiencia en estas cosas.

Situado otra vez sobre el tablero colocado sobre ruedas y tirado de la manilla por los jóvenes me fueron introduciendo hasta el salón amplio. El salón era rectangular. estaba lleno de cosas: tallas terminadas, otras a medio hacer; troncos en el suelo, muchas herramientas pequeñas colgadas en otra pared; algunos bancos de carpintería y por el suelo virutas y trozos de madera. En un rincón había un furgón, es esos momentos, apagado. Junto a él varios badiles y un fuelle para dar aire.
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=qSrwEVqzyvk

martes, 3 de marzo de 2015

VIEJOS ESCRITOS



Y ME HABLÓ LA MADERA...

Así fuimos caminando durante un tiempo, hasta que llegáramos a la entrada de la ciudad. La calle por donde cruzamos estaba llena de gentes. Unos albergaban las paredes de las fachadas de sus casas; otros limpiaban la calle de restos de basuras. algunas mujeres colgaban en las ventanas adornos, al día siguiente iba a pasar por allí la Procesión del Corpus y querían tener todo a punto. 

Tal vez por eso, cuando el carro en el que yo iba cruzó por aquella calle, las personas mayores nos miraban con cierta extrañeza y hasta con rechazo. Quizás pensaban que la limpieza que ellos procuraban se iría al traste con nuestro paso.

Procuramos pasar con la mayor rapidez que pudimos por aquella calle. Al fondo de la misma, giramos a la izquierda y nos metimos por la que se encontraban los talleres de imágenes, a uno de los cuales nos dirigíamos.
PARA ESCUCHAR

lunes, 2 de marzo de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA ...

Al fin, a la voz de arre, los bueyes, animales obedientes, a una voz conocida comenzaron a andar. 
Las ruedas chirriaron en un primer momento, pero enseguida desapareció aquel ruido y sólo se oía la voz de mi amo que desde su casa, me decía: hasta siempre, hasta siempre.
Yo no pude decir nada, pero internamente pensé que quizás algún día volveríamos a vernos.

El pisar de los bueyes se oía claramente. Los jóvenes que caminaban detrás comenzaron a cantar. A duras penas entendí la letra, porque seguía conmovido, aunque si recuerdo que uno de los jóvenes el más alto cantaba: el aire cruza los montes/ las emociones el alma/ olores lloran las flores/ y los ojos lloran lágrimas.
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=3yuTYg58MCw

domingo, 1 de marzo de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA ...

Así lo hicieron los jóvenes y el resultado fue todo un éxito. Plataforma y tronco y los dos jóvenes estaban arriba en el carro; otros dos abajo sujetando los bueyes, el hombre del calzón verde hablando con mi amo y yo tranquilo, sereno, contento.
Antes de arrancar de aquel lugar carro y caballeros, mi amo se llegó hasta mí, pasó su mano por encima de mi superficie y dijo en voz baja: Adiós, que seas útil y que te miren muchos ojos a lo largo de los siglos. Yo es posible que sea la última vez que te mire. Aunque quien sabe las vueltas que pueden dar las cosas.

A lo que yo respondí: hasta siempre o hasta que la providencia nos depare un nuevo encuentro. De los ojos de mi amo cayeron dos lágrimas. Yo también lloré para adentro.
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=xpRvnBS98IE

sábado, 28 de febrero de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA...
A continuación con cuatro maromas gordas, pero suaves, me rodearon quedando yo fijo, inamovible, pero sereno.
A continuación, ambos jóvenes tiraron de la manilla y toda mi existencia, iba sobre ruedas, Llegó hasta la salida de aquel amplio almacén. Allí en la calle, nos esperaban otros dos jóvenes y un viejo carro de madera al que estaban uncidos unos bueyes, al parecer entrados en años.

Al llegar a este lugar, otra vez el hombre del calzón verde y blusa negra comenzó a dar órdenes: Arrimad el caro a aquel promontorio, ponedlo hacia a tras de suerte que la base del carro llegue hasta la parte alta del promontorio. Antes corred la plataforma hasta arriba del promontorio de suerte que con facilidad pueda correr la plataforma y el tronco hasta dentro del interior del carro.
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=w9Bs0MTT7AE

viernes, 27 de febrero de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA

Esta vez la espera fue corta. A los veinte minutos estaban allí, de nuevo, los dos jóvenes, el hombre del gabán verde y mi amo. Además traían una especie de transportador manual. 

Se trataba de un tablero ancho, plano y de cinco centímetros de espesor, colocado sobre ocho ruedas de tamaño pequeño. En la parte más estrecha sobresalía una manilla que servía para tirar de ella y poder así arrastrar con facilidad el peso que se pusiera sobre el tablero.

Enseguida me di cuenta que aquel mamotreto iba a ser mi silla gestatoria. En efecto, así fue. Los dos jóvenes siguiendo siempre las órdenes del hombres de calzón verde y blusa negra y bajo la atenta mirada de mi amo, gordinflón y sereno, consiguieron, con facilidad y sin molestarme lo más mínimo, pasarme del montón donde me hallaba a la plataforma en cuestión. 

Para ello se colocaron a mi vera, y sirviéndose de unos trozos de madera apropiados, casi sin esfuerzo rodaron mi voluminoso perímetro hasta llegar a la plataforma de madera. 
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=merNu7LS-vA

miércoles, 25 de febrero de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA
Hasta mi llegaron cuatro personas. Mi amo, feliz y sonriente; el hombre del calzón verde y blusa negra, que no dejaba de mover sus manos; y dos jóvenes que por su aspecto externo parecían alegres, contentos y llenos de fuerza. 
El hombre del calzón verde y blusa negra se dirigió a los dos jóvenes y les dijo: es éste. Y me señaló a mí. Y siguió: tratádmelo bien. No le hagáis daño. Procurad que no sufra. Sobre todo en el traslado, porque en su interior, estoy seguro, lleva una imagen fina y delicada.
Esta observación me llenó de alegría y me dio tranquilidad y ánimos. Sabía que iba a sufrir un nuevo traslado pero me consolaba que iba a ser realizado con delicadeza y esmero, lo que me llenaba de paz y de felicidad.

Y en esos momentos, comencé a sentir que algo hermoso iba a brotar de dentro de mí y me puse orgulloso. Cuando quise darme cuenta, los cuatro hombres habían desaparecido. 
Otra vez solo y a esperar...
PARA ESCUCHAR

martes, 24 de febrero de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA
A la mañana siguiente, lo primero que hice al levantarme, fue mirar al cielo y dar gracias por el nuevo día. 
Me gustaba asomarme a la ventana y dar gracias por el sol y el viento, por las gentes que cruzaban la calle, por los trabajadores, por los niños, por la alegría y por la esperanza; por todo, porque todo es bueno.

A las nueve ya estaba otra vez en el templo. Me preparé para “tratar de amistad” con quien sabía me esperaba. Y no tardó en golpear mis oídos la voz acostumbrada. 
Oí que me decía: “Como decíamos ayer..., al principio no sabia hacer otra cosa que hablarme a mi mismo. Así estuve varios días desde la última visita. Pasados las primeras emociones me tranquilicé. Y me exigí a mi mismo, tranquilidad, sosiego y dar tiempo al tiempo. 
Así pasé -no sé cuantos días- un tiempo no muy largo. Permanecí sosegado e inmóvil, tranquilo, esperando. Al fin, un día, de par de mañana, comencé a oír de nuevo voces. Primero lejanas, después más próximas y, finalmente, a dos pasos de donde yo estaba. 
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=ten-Z3B78aE

lunes, 23 de febrero de 2015

VIEJOS ESCRITOS

Y ME HABLÓ LA MADERA
Aprovechando este momento, tan lleno de emoción y de misterio, salí del templo y me fui a pasear un poco por las afueras del barrio. La tarde estaba templada. Una suave brisa procedente del sur movía las ramas más delgadas de los árboles. Algunos niños jugaban entre un montón de cartones. La circulación en aquellas horas era escasa y por el aire cruzaba un avión a mis ojos diminuto. Junto a mi cruzó un perro negro y peludo. Detrás casi rozándome pasó un chico montado en su bicicleta negra.
Aquel paseo pacificó mi alma. A la vez, aproveché para poner en orden las cosas que había oído no mucho antes, procedentes de la voz que venía escuchando en el templo intermitentemente. Y sobre todo, aproveché esos momentos de paz y de tranquilidad, para comprometerme a seguir la huella de aquella historia. Por eso deseaba tener más noticias sobre el tema.

Aquella noche soñé con árboles tiernos y con troncos robustos, con imágenes en potencia y santos venerados, con alegrías de gargantas débiles y ruegos de gentes arremolinadas. 
PARA ESCUCHAR
https://www.youtube.com/watch?v=C_1-JSQIUyo